Los materiales utilizados tanto para la fabricación exterior como para el diseño interior son de última generación. Se utilizan preferiblemente materiales reciclados no tóxicos o acordes con el medioambiente, reduciendo drásticamente la generación de residuos y los niveles de CO2.
El proceso de construcción es respetuoso con el medioambiente y se adapta a los objetivos de la RESERVA DE LA BIOSFERA porque no extrae recursos propios de la Isla para la fabricación y apenas genera residuos.